Andrea Domínguez, Primera Mujer Campeona Mundial Motonáutica, Entrenó a Escondidas de Su Familia

Andrea Domínguez, Primera Mujer Campeona Mundial Motonáutica, Entrenó a Escondidas de Su Familia

¡Hola! Soy Andrea Domínguez, piloto profesional de motos acuáticas. Llevo 16 años en este deporte y actualmente soy la primera y única mujer en correr en las grandes ligas en Aqua Bike.

¿Cómo descubriste tu talento?

Bueno, realmente todo empezó más o menos hace 16 años. Yo, desde muy pequeña, amaba los deportes extremos y, junto con mi hermano, él iba a hacer motocross y yo ahí detrás. Y mi hermano me empezó a entrenar poco a poco. Él empezó a correr en motos acuáticas y mi mamá decía: «No, tú te metes a ballet, tú te metes a piano». Me metió a porras, lo metía todo. Y realmente, como que yo no era feliz ahí y me daba cuenta de que lo hacía con amor y dedicación por mis papás, pero no era Andrea Domínguez. Hasta que un día, mi hermano me empezó a entrenar a escondidas. Y en una carrera, en la primera competencia que mi hermano tuvo en Medellín, abrieron una categoría infantil donde era mínimo 15 años de edad. Y el presidente de la federación, mi hermano habló con él y dijo: «Como Andreita está muy pequeña, no se puede. Las motos son muy grandes». Yo no sé qué hizo mi hermano, pero finalmente competí en la categoría infantil con una moto más pequeña, a escondidas de mi papá y mi mamá, obviamente. Y él me vistió total de negro y empecé a correr y gané la competencia en la moto más pequeña. Y yo me quité el casco y ahí yo solo escuché el nombre completico: Andrea Domínguez, ¿qué haces ahí montada? Mi mamá nos regañaron, obviamente. Pero ahí empezó el amor por este deporte.

¿Por qué es importante el trabajo en equipo?

Bueno, literalmente, cuando yo decidí salir de mi país a entrenar y a querer ser algo más, querer mostrarle no solo a Colombia sino al mundo que hay muchos pilotos colombianos, y yo decía: «Bueno, me toca ir sola». Porque las primeras carreras iba sola, literal, con mis motos y mi motos era mi equipo. Y mi hermano, que nunca olvidó esto, él me enseñó toda la mecánica que yo sé, porque no teníamos los recursos para tener mecánico, no teníamos los recursos para tener un equipo de carreras, sino que mi equipo en sí era mi familia. Por videollamada, mi hermano, a las 2-3 de la mañana, haciendo marañas con su teléfono, intentando hacer la mecánica en la moto, él desde Colombia y yo desde EE. UU. Y poco a poco, eso fue surgiendo y, bueno, gracias a Dios, llegamos a las grandes ligas y cuento con un gran equipo, que es el equipo de Kuwait, que me ha abierto las puertas. Y yo siempre he dicho: «Andrea no gana, no gana el piloto, ganas un equipo entero». Porque si no estamos realmente con la máquina a punto, con el psicólogo al 100%, o con cada quien haga su labor, ningún piloto lograría hacer todo solo.

Un tip para cambiar al mundo.

Bueno, yo creo que primero uno tiene que darse cuenta de lo que lo hace vibrar, es lo que a las cuatro de la mañana no le da pereza tener la lagaña, sino que no quiere despertarse y seguir luchando por eso. Y yo creo que no tiene que estar muy, muy seguro y confiado de lo que quiere y, obviamente, siempre estar cumpliendo el reglamento y los factores que deben seguir, y siempre siendo un ser humano muy correcto en lo que hace. Yo he visto muchas circunstancias y muchas historias de amigos corredores que suben en cinco segundos pisoteando a todo el mundo, y la carrera en cinco segundos subió, pero en dos se cayó.

Bueno, también les quiero invitar a que ingresen a loszuper.org para que miren las habilidades. A mí que me sirvió muchísimo en mi vida profesional y deportiva trabajar en equipo. Trabajar en equipo, para mí, es fundamental, porque en cualquier carrera donde yo esté, si ninguno de las personas que me ayudarán a mí, Andrea Domínguez, no estaría donde está. Y obviamente, creer en ustedes. Crean en ustedes, crean en sus sueños, porque eso es lo que los hará llegar muy lejos.

Alexandra Sarmiento, Maquilladora Detrás de «Historia de un Crimen: Colmenares», Cuenta Su Historia

Alexandra Sarmiento, Maquilladora Detrás de "Historia de un Crimen: Colmenares", Cuenta Su Historia

Hola, mi nombre es Alexandra Sarmiento. Soy diseñadora de maquillaje para cine y televisión.

¿Cómo descubriste tu talento?

Mi mamá tenía peluquerías y, digamos que, crecí en el mundo de la peluquería. Pero yo nunca quise, o sea, yo no quería trabajar en una peluquería. Yo quería hacer otra cosa completamente diferente. Pero cuando salí del colegio, estaba medio desubicada y vi como opción que el maquillaje podría ser algo que iba a estar en la misma rama de la peluquería, pero que podría ser algo mucho mejor y más chévere para trabajar. Y algo súper curioso que me pasó a mí, que es una experiencia súper bonita, es que empecé a trabajar con una maquilladora aquí en Colombia, hacía cositas con fotógrafos.

Y una vez, un fotógrafo nos conoció porque había hecho una campaña y no le fue tan bien con la maquilladora que tenía, y necesitaba a alguien súper rápido para arreglar las fotos que habían hecho. Me conoció a mí, empecé a trabajar con él, y al tipo le gustó mucho mi trabajo. Comencé a trabajar mucho con él, y un día él me dice que trabaja en una universidad y me dice: «Oiga, ¿Por qué usted no da clases de maquillaje en la Tadeo?» Yo no he pisado una universidad y ¿ahora voy a trabajar para dictar clases?. Osea, no era como, osea, me daba muchisimo miedo. El me dijo: «usted simplemente va a hacer lo que ya sabe». Antes de eso, yo ya había estado en Alemania, yo viví en Alemania seis meses y hice un cursito. No entendía mi papa por qué no entendía nada, pero esto es muy visual, entonces…

Antes de eso, ya había hecho pues, como el curso en Alemania. Entonces, el mismo día me dijeron que mañana iba a dictar clase. Fue súper chistoso porque yo llegué a la universidad y me temblaban las manos, me temblaba la voz. Y cuando llegué, él me decía «tranquila». El hombre me vendió como la súper maquilladora que ya tiene experiencia, pero no tanta como la que tengo ahora. Y pues, muy nerviosa. Entonces, eso me demostró a mí que podía hacer muchas cosas y que, a pesar de que no había hecho una carrera universitaria, esto era un oficio. Y en este momento, ya lo están volviendo una profesión, pero es un oficio muy bonito y que puede ayudarte no solamente a verte bonita, sino que tiene una cantidad de costes.

¿Cuales fueron tus obstaculos?

Me fui a vivir a Francia y tuve, pues, una oportunidad muy bonita de poder estudiar con grandes marcas. Viví experiencias que jamás imaginé que podia lograr hacer. Cuando regresé a Colombia, llegué muy perdida y quería tener una independencia económica, yo me case, pero quiero tener una independencia economica con mi carrera. Me pasan muchas cosas con un cáncer, y después de ese cáncer, osea, siento que me cohíbe a hacer lo que quería hacer por estar en casa. Decidí montar como quería, montar un espacio para poder empezar a maquillar. Montarlo fue súper difícil porque, digamos, no tenía el dinero para hacerlo. Y con las uñas, empece a crear ese espacio, con el apoyo de mi familia. Monté mi espacio. Fue muy duro porque tenía que sacar para pagar un arriendo y no tenía todavía la cantidad de gente como para poder vivir. Pero no me dejé. Pero yo creo que parezco paisa porque vendo hasta huecos. Soy muy emprendedora y desde chiquita he sido emprendedora. Trabajo desde los 14 años he estudiado y trabajado. Entonces, no me deje de esa situación de empezar y crear una empresa en Colombia es muy difícil, pero lo logré. Fui creciendo y creciendo, y una clienta contenta trae a otra clienta, y un fotógrafo se recomienda con otro. Empece a hacer comerciales y empecé a hacer series web, empece con cosas chiquitas. Y pues, bueno, ya a lo que he llegado hoy es cómo… pues, me siento muy feliz.

¿Cuales han sido tus 3 éxitos?

Pues el primero, haber dictado las clases en Tadeo. Eso para mi fue cómo, yo me acuerdo que llame a mi mamá y le dije: «Mamá, voy a dictar clases en la Tadeo», osea esto es como…, mi mamá se puso a llorar de emoción muchísimo. Ese logro fue el primero. El segundo, la primera serie que hice, hice pues, todo el diseño de maquillaje, toda la caracterización y efectos especiales, claro, con un equipo maravilloso que ha trabajado de la mano conmigo. «Colmenares: Historia de un crimen» para Netflix. Y, ¿que otro? pues mi estudio, haber montado mi estudio. A pesar de muchas cosas y luchar con muchas cosas. Esas 3 cosas han sido hermosas en mi carrera.

¿Qué se necesita para un proyecto de vida?

Es complicado porque cuando uno sale y no sabe por qué camino irse, pienso que es muy importante planearlo y no es solo una cosa del corazón. Porque a veces uno dice muchas veces como y sueña, y yo quiero hacer esto. No creo que haya que sobre un papel planear las cosas y decir «tengo tanto, puedo ahorrar tanto» y empezar a hacer poquito a poco. Y todo va creciendo, o sea, yo empecé con un espejo, una silla y una maleta de maquillaje básica. Que en este momento, yo veo mis cosas y es como wow. Pero sí, es empezar poquito a poco, ser muy juicioso. Yo ahora siempre he ido, he ahorrado muchísimo y he sido muy organizada con mi dinero. O sea, el gasto y compro mis cosas y todo, pero siempre trato de ahorrar. Creo que para mí, eso ha sido fundamental, ahorrar y no endeudarme. Porque a veces uno quiere más y uno a veces ve o se quiere comprarse diez súper espejos y las súper sillas y todo. Pero siento que cuando tú vas poquito a poco, las cosas van creciendo, va mucho mejor y más fácil.

Tips para un proyecto de vida.

Yo creo que para mí lo más importante es poder enseñar sin esperar nada. Yo he trabajado con muchas personas y he tenido como mucha gente que ha trabajado en mi equipo, y no tengo miedo enseñarles lo que yo sé. Yo viví cosas muy duras cuando empecé esta carrera, y la gente es muy envidiosa y la gente es muy egoísta. Y yo creo que su inseguridad, yo siempre enseño con todo el amor del mundo a la gente, y siento que la vida me va trayendo cosas mucho más lindas. Entonces, yo creo que creo que lo más importante es desprenderse de lo que tú sabes, poder transmitírselo al resto de la gente para que aprenda. Eso creo que seguridad, o sea, yo no tengo miedo de que nadie va a saber más que yo, que me van a quitar. Y siento que eso es muy importante, como esa bondad, la alegría. Yo me disfruto muchísimo todos los días. Para mí, es como la felicidad venir a mi estudio, maquillar. Y siento que eso es súper importante, es ser feliz y disfrutar lo que tú haces.

¡Hola! Los invito a que ingresen en la página de loszuper.org para que inicien su proyecto de vida.

 

Pedro Santos, Fotógrafo y Activista, Dice Ser La Antítesis Sobre Tener Una Vida Ejemplar

Pedro Santos, Fotógrafo y Activista, Dice Ser La Antítesis Sobre Tener Una Vida Ejemplar

Mi nombre es Pedro Santos. Soy fotógrafo y activista.

¿Cómo descubriste tu talento?

Personalmente, no creo que haya como una fórmula matemática escrita, pero a mí la única fórmula, digamos, que me ha servido mucho es yo siempre he sido muy consciente de escucharme a mí mismo, al menos intentar escuchar lo que yo he querido en esos momentos. Muchas veces lo que no quiero en esos momentos, como que no es lo que es y pucha, y uno mete la mano y dice «no, por ahí no es» y se devuelve. Pero digamos, yo desde muy chiquito quise ser fotógrafo, será como tenía una sensibilidad con eso y me conectaba con una cámara. Pero claro, digamos que siempre está el ruido de la cabeza, después tú vas a ser fotógrafo y ¿qué vas a hacer con tu vida? ¿Qué vas a vivir? Sí, entonces siempre lo tuve ahí como una cosa que lo quería hacer. Y entonces me fui a la universidad, estudio de cine, digamos, porque si le sonaba un poquito más completo. No siempre me ha gustado también escribir mucho, entonces dije «bueno, por ahí puede ser». Y no, no me sentía contento, como que había algo que me frena, pero bueno, igual ahí ya estaba haciendo un poquito lo mío. Y de ahí salí a estudiar fotografía, me encantó, fui muy feliz estudiando fotografía.

¿Cómo recomientas descubrir el talento?

Para mí, algo que siempre fue un poquito determinante y también me ha ayudado alrededor o a lo largo de la vida ha sido que siempre ha sido una búsqueda responsable. Yo le digo a la gente: nadie tiene por qué tener claro quién es ni para dónde va, pero sí tiene que tener el compromiso de uno mismo de saber que no está mamando gallo. Una gran diferencia entre «yo no sé para dónde voy» y me quedo echado en la casa, a la lucha, o que realmente no sé para dónde voy, pero si estoy intentando y estoy activamente buscando para dónde voy. Porque no importa si decido de un mes ser cerrajero y no me gustó o no conecté con eso, pero al menos sabes, digamos, «no sé qué, listo, no soy cerrajero, pero soy bueno con las manos». Y entonces ya estás un poquito más ahí, no hoy. Entonces, la próxima vez te vuelves carpintero y no te gusta, pero te gusta la pintura, y entonces ya sabes que te gusta la pintura y que eres bueno con las manos. Y siempre yo creo que cada experiencia de vida forma, equivocado que crea que uno está siempre le está entregando a uno algo, si uno es consciente de que lo que estás en su búsqueda. Yo lo único que le puedo decir a la gente, porque yo tampoco tengo ni idea cómo hacer estas cosas, de verdad yo soy el antítesis de lo que sería una vida ejemplar, pero eso, que estén en una búsqueda activa en donde sepan que hay que conectar talento, pasión y visión. Y pues, cuando eso se junta, eso es una bola de fuego impresionante, porque a más la gente le crea, uno se lo cree. No está pensando uno, digamos, «es que tengo que ser millonario». No sé qué, esa expresión es que muchas veces la sociedad nos pone. El «si no tú», entonces ya dices, «bueno pues yo sacrifico una cosa por la otra, pero es lo que me hace feliz». Pero uno siempre tiene que estar, como en esa búsqueda consciente, curioso siempre, en introspectiva con uno mismo.

¿Cómo usar el talento para el bien del mundo?

Yo soy muy afortunado, que eso me lo inculcaron mis papás, pues desde chiquito, pero es una responsabilidad. Yo no sé si generacional o qué, pero yo sí creo que todos, desde donde estemos, como podamos y como estemos, tenemos la responsabilidad de expandir al otro, porque es que si uno solo se expande y solo se echa agua a las flores de uno, pues no tiene sentido. Ahorita que yo estuve en la frontera con Venezuela, estuve en Cúcuta, en unos barrios, y estuve pues con los migrantes, como te decía, y yo quise enfocarme, digamos, en historias positivas. Digamos, entiendo que hay un tema muy fuerte, pero en el momento en el que más miseria y en el momento en el que más cruda se ponen las cosas, hay un brote de humanidad siempre mucho más fuerte. Si yo te impulso a ti y tú me impulsas a mí, pues si es como una energía mucho más fuerte y todos nos ayudamos y se vuelve mucho más fácil o mucho más potente surgir.

Los invito a que entren en loszuper.org. Todo lo que estuvimos hablando y creo que lo reúnen, digamos esa búsqueda interna el encontrar el talento, en encontrar el propósito. Muchas veces nos sentimos perdidos. Entre, miren, busquen de pronto les sirve algo y pronto llegando un poquito más cerquita lo que sentían que necesitaban.

Pedro Santos nos muestra con su historia el poder de conocerse a sí mismo que significa conocerse a sí mismos es hacernos preguntas sobre lo que nosotros somos, queremos hacer, lo que soñamos. También sobre nuestros defectos como de nuestras fortalezas. Conocerse a sí mismos implica tener actitud de turista explorar, salir a la calle y explorar nuestro entorno y verlo con ojos nuevos. Entender que cada vez que damos un nuevo paso y recorremos un nuevo camino, hay nuevas preguntas de lo que somos como seres humanos. Conocerse a sí mismos es fundamental en la economia actual porque entre más conozcamos cuales son nuestros superpoderes, podemos desarrollar nuestros talentos.

El Autor Ismael Cala Cuenta Detalles Desconocidos Sobre Su Historia

El Autor Ismael Cala Cuenta Detalles Desconocidos Sobre Su Historia

Hola, soy Ismael Cala, autor de «El poder de escuchar» y otros libros de desarrollo humano, crecimiento y liderazgo. Soy el fundador y presidente de la Fundación Ismael Cala y de la Alianza de Impacto Latino, junto a Pavlik Foundation.

¿Cómo descubriste tu talento?

Yo creo que el primer talento que identifiqué en mí, gracias a una señora que llegó a mi aula de cuarto grado cuando yo tenía sólo ocho años, es que me encantaba compartir historias, comunicar historias. Y ya yo lo hacía en la iglesia porque mi abuelita me llevaba a la iglesia. Hice mi primera comunión y catequesis en un país como Cuba, donde estaba prohibida la religión. Es decir, que a los 11 años ya no pude seguir. Pero a los 8, mi vida cambió cuando levanté la mano. Esta señora, Nilda de Alemán, que todavía vive a sus 86 años en Santiago de Cuba, mi ciudad natal, dijo: «Niños, ¿quién quiere leer en voz alta? Porque estoy reclutando niños para hacer un programa dramatizado en radio».

Yo dije: «Guau, en radio, narrar, actuar. Ya leí en la misa en la iglesia. Dije, este es el próximo nivel, el próximo paso». Entonces, ahí descubrí que tenía una vocación y que tenía un talento por contar historias y por comunicar historias, sobre todo para que otros pudiesen escucharlas. Y ese, yo creo que fue mi primer talento. Y fíjate que creo que fue una habilidad importantísima, porque hoy por hoy, y los zúpers trabajan en esto, comunicación asertiva, comunicación no violenta, el tema del saber escuchar, que fue mi primer libro «El poder de escuchar». Todo eso viene conectado a ese momento, a los 8 años, donde levanté la mano tímidamente, pero mi destino cambió.

¿Se pueden heredar los talentos?

Los talentos tienen un porcentaje que yo siento que pueden ser contextuales, del contexto del entorno y hasta un poquito hereditarios. Porque obviamente vienes de una familia donde tu abuelo fue abogado, tu papá es abogado. Ves, como niño, a tu padre trabajar en el derecho y haces preguntas y te entusiasma. Y tu papá, además, con mucha pasión, te dice: «A lo mejor algún día serás abogado». Y eso influye mucho en cuanto a la decisión que toma un adolescente en qué quiere estudiar.

Pero yo siento que los talentos también son únicos en el sentido de que no necesariamente uno es o le gusta lo que ve que le gusta a su madre o le gusta a su padre. Llega un momento en nuestras vidas donde uno tiene que decir: «¿Qué soy? ¿Qué realmente quiero ser?» Y encontrar la zona de genialidad y los talentos que tenemos dentro, que no necesariamente van a coincidir con los que tienen nuestros progenitores o nuestro círculo más estrecho.

En mi caso, por ejemplo, mi padre fue ingeniero químico. Influyó muchísimo porque yo estuve a punto de estudiar ingeniería química para seguir sus pasos. Mi mamá no llegó a la universidad, fue una secretaria. Pero la vocación pudo más, mi talento de comunicar pudo más. Y por eso, cuando me tocó estudiar, dije: «Estudio algo que esté relacionado con esto».

Entonces, siento que es como la pregunta del líder: ¿nace o se hace? Bueno, no he conocido ningún líder que no haya nacido. Todos nacieron. Pero en realidad, el liderazgo se hace. Y los talentos también se trabajan, con disciplina, con mucha pasión, con perseverancia y un poco de paciencia. Porque llegar a tener maestría en algo lleva, por lo menos, un promedio de 10.000 horas de práctica.

¿Cómo mantenerse enfocado?

«Uno de los ejemplos más fáciles de poner para perder el enfoque es cuando uno migra, digamos, y yo tuve varias migraciones y cuando salí de Cuba a los 28 años, era muy fácil desenfocarse. De hecho, yo recuerdo que tuve que dejar la industria de los medios masivos de comunicación y trabajar como mesero. Y fíjate, es interesante porque siempre supe que mi enfoque era volver a los medios masivos de comunicación, pero que haría lo mejor posible los trabajos que, en esa transición, me tocaran hacer. Fui mesero de un restaurante dominicano, fui mesero de un restaurante italiano, fui profesor de español (que era un dolor de cabeza porque, aunque uno hable español, yo no sabía enseñar bien la gramática a los canadienses; eso fue en Toronto), animé un cabaret con cena. Entonces, muchos trabajos de transición, pero no perdía el enfoque. Escribía todo el tiempo hacia dónde era mi norte, cuál era mi sueño, hacia una estrategia de decir: en menos de dos años, estaré de vuelta en lo que constituye mi esencia y mi pasión, y así lo logré. Entonces, el poder de visualizar el futuro es lo que nos garantiza el enfoque. Si el ser humano no tiene una convicción, pero además, con una emoción elevada y claridad intencional de hacia dónde va, pierde el rumbo porque la vida nos lanza curvas, nos lanza desvíos, pero si tú no tienes el foco a dónde vas, entonces no tienes la intención correcta. Y lo mismo le pasó en EEUU, yo llegué a EEUU, no tenían, digamos, un trabajo fijo, pero yo sabía que yo quería llegar a CNN en Español y convertirme en uno de los presentadores titulares de la cadena, y me costó diez años, desde el 2001 hasta el 2010, a finales, diez años, una década. Eso es para mí enfoque, es no tirar la toalla, no dejar caer tu sueño, ser perseverante y tener paciencia, y sobre todo, prepararte para que las oportunidades que llegan tú las puedas aceptar y responder con excelencia.»

Un tip para construir un proyecto de vida

Créeme que el antídoto para uno crecer ilimitadamente y no sentir resentimientos en el proceso es agradecer todos los días al levantarse. Octubre en los días también, hacerlo dos veces al acostarse también. Tú dices: ¿Por qué agradezco este día que he vivido, que aprendí con qué choque y eso que me hizo, además, darme con la pared? Que me enseñó cómo lo haré mejor mañana. Y cuando uno se va con ese conocimiento a poner su cabecita en la almohada, te expande es la conciencia y puedes tener la ambición más grande del mundo y tu visión, además, va a ser una visión de un líder, como digo yo, el líder bambú, que es el líder mindfulness exponencial. Es alguien que se autoconoce, como los súper tienen en este programa de habilidades de autodescubrimiento. Te conoces más, creces mejor, creas una mejor visión y con esa visión impactas el mundo. Ahí está. Ya a pocas personas se les ocurre hablar de este tipo de habilidades como habilidades blandas porque, para mí hoy, son las duras. Hoy son estas habilidades, las que en este caso, siendo yo Ismael Cala, el líder que hoy me siento ser, con toda humildad, pero de esas habilidades y no muchas de las otras asignaturas que me dieron en la escuela, las que me han llevado a un nivel de autoconocimiento y de impacto social que puedo compartir con el mundo. Entonces, ya lo dijo Gandhi cuando dijo: «Sé tú el cambio que quieres ver en el mundo». 

Te invito a que cada día tuyo no pase por accidente, sino que cada día sea un día donde tú cuentes cada segundo y que lo hayas hecho una buena inversión y no un mal gastar del capital más importante que tienes, que es tu tiempo, tu energía. Te invito a que sigas aquí viendo mucho más material en loszúper.tv y que también te conviertas en un graduado de este maravilloso movimiento que es lo Zúper. En algún momento nos encontraremos en el camino de la vida.

Natalia Bayona, Líder de Innovación en La OMT, Habla Sobre Dejarse Llevar Por Las Pasiones

Natalia Bayona, Líder de Innovación en La OMT, Habla Sobre Dejarse Llevar Por Las Pasiones

Hola, mi nombre es Natalia Bayona. Hoy en día trabajo en la Organización Mundial del Turismo.

¿Cómo descubriste tu talento?

Bueno, la historia es bastante particular. Desde muy niña, siempre soñaba con crear y cambiar el mundo. Da la casualidad de que cuando tenía 14 años, Colombia se estaba abriendo al mundo en los años 90. Tuve una clase que se llamaba «Globalización» y desde el colegio me decían «Mafalda» de niña, porque siempre quería cambiar el mundo.

En uno de esos ensayos sobre liderazgo en el colegio, acerca de cómo me veía en el futuro, no tuve ningún problema en decir que quería ser Ministra de Relaciones Exteriores para cambiar la imagen de Colombia y para efectivamente trabajar por el comercio de mi país.

Lo que no sabía es que tiempo después, estudié Gobierno y Relaciones Internacionales. La verdad es que siempre he sido muy inquieta y creativa. Y efectivamente, desde antes de graduarme de la universidad, empecé a trabajar. Lo más bonito de todo es que, sin siquiera haberme graduado, y trabajando gratis, mi primer trabajo fue ayudar a cambiar la imagen de Colombia en el exterior.

¿Cómo recomiendas descubrir el talento?

Yo lo que creo importante es dejarse llevar por las pasiones. No importa si uno es arquitecto, si uno es artista, si uno es abogado; si uno es el mejor, va a prosperar toda la vida. Yo siempre, tengo que admitirlo, siempre estuve en una disyuntiva entre estudiar Comunicación y Periodismo o estudiar Gobierno y Relaciones Internacionales, porque sentía desde muy niña que una de mis grandes pasiones es escribir y otra es comunicar. Con lo cual, desde muy joven, empecé a ver ese tipo de virtudes.

Lo bueno es que siempre tenemos que trabajar en equipo, sin importar cómo ni porque. Encontré dos padres fabulosos que me incentivaron desde muy niña a ser parte de grupos de edición, de los grupos sociales y diferentes grupos deportivos. Desde muy, muy niña.

¿Por qué es importante el trabajo en equipo?

Primero, porque la perfección no existe. Entonces, si fuéramos perfectos, claramente sería un trabajo absolutamente individual. Como no somos perfectos, tenemos que complementarnos. Las grandes empresas, desde hace 10 años, no se han dado cuenta de que la competencia ni siquiera son las otras empresas similares a sus industrias. Pongo un ejemplo: los bancos se dieron cuenta de que ya los otros bancos no son su competencia. Las aerolíneas lo mismo y los hoteles, etcétera. ¿Por qué? Porque vino la revolución tecnológica y con ella llegaron las famosas startups o empresas de temprana creación, y por eso se habla de innovación abierta. Porque hay una necesidad que el grande, que es la gran corporación, necesite innovar y la startup, que es la empresa joven de temprana creación, tiene todas las habilidades y puede soportar a este grande a crecer. Entonces, una empresa como Coca-Cola crea aceleradoras, coworking y un fondo de capital riesgo para inversión en startups. siendo Coca-Cola quien es. Ni siquiera Coca-Cola hoy en día, ni Google ni ninguno. No sé si lo vieron, pero allí Facebook sacó una criptomoneda. Ninguna empresa, por muy tecnológica, por muy buena y por muy valorada en bolsa, trabaja hoy en día sola. Entonces, ¿por qué los individuos tenemos que trabajar solos? Si ni siquiera esos monstruos son capaces de trabajar solos. Necesitan siempre de alguien, y por eso se llama el famoso ecosistema de emprendimiento. Porque el unir diferentes puntos estratégicos, gente estratégica, no todos tenemos las mismas habilidades. Yo puedo ser espectacular comunicando, pero quizás no sea la mejor en creando un balance para una empresa. Entonces, si logro juntar las mejores habilidades de cada una de las personas y lograr liderar, seguramente llego más rápido y hago las cosas mucho mejor que si lo hago sola pensando que me va a lucir sola. Entonces, a veces el ego hay que dejarlo al lado y a veces hay que ser bastante humilde para darse cuenta. ¿O es que Barack Obama llegó solo a la presidencia? ¿Donald Trump llegó solo a la presidencia? Ni siquiera los hombres más poderosos del mundo, los hombres más ricos del mundo, necesitan de un equipo para poder salir adelante.

Bueno, yo soy joven, igual que ustedes. Soy millennial, me encanta, y tengo que decirlo, la transformación digital. Por eso, los invito a que entren a loszuper.org, para que se entrenen en las diferentes habilidades que no son una nice to have, sin un must have. Los invito a todos los jóvenes a que puedan estar con los super profes allí, y puedan aprender de por qué el trabajo en equipo, porque la creatividad, porque el liderazgo, porque todas esas habilidades blandas son tan poderosas para poder ejercer un cargo, y no solamente un cargo, para poder cambiar el mundo y la manera como lo estamos dirigiendo.

Johana Bahamón Sobre Cómo Encontró Su Verdadera Pasión a Los 30 Años

Johana Bahamón Sobre Cómo Encontró Su Verdadera Pasión a Los 30 Años

¡Hola! Mi nombre es Johana Bahamón. Soy la directora y fundadora de la Fundación Acción Interna.

¿Cómo descubriste tu talento?

Bueno, realmente encontré mi, no tanto mi talento, pero sí mi pasión un poco tarde. Lo encontré a los 30 años. La mayoría de la gente, desde chiquita, pues tiene como su pasión y sabe lo que quiere hacer y todo. Yo encontré mi pasión a los 30 años y realmente mi vida se dividió en dos desde que encontré la pasión, desde que supe que era realmente lo que me motiva a levantarme de mi cama todos los días, a trabajar en algo y fue la cárcel.

Yo nunca habia estado en una cárcel. Conocí como el espacio, cómo vivían, lo que hacían. Y ese día salí pensando en que uno puede estar privado de su libertad, pero eso no significa que no pueda estar privado de dignidad. Y en ese momento, cuando salí de la cárcel, sentí que quería hacer algo. No sabía ni qué, ni cómo, ni para qué, ni por qué, pero sentí que sí quería hacer algo para esta población, algo en la cárcel. Quería conocer más de lo que pasaba con la población carcelaria, y ahí empezó mi trabajo, el que llevo desde hace siete años, el que me apasiona, el que me hace sentir feliz, el que me hace levantarme con ganas de mi cama todos los días a ir a trabajar.

De hecho, lo siento que no es tanto como un trabajo que yo estoy haciendo algo por alguien, sino realmente esta población carcelaria ha hecho mucho por mí, por mí como persona, por mí como mamá, por mí como trabajadora, por mí en todos los sentidos. Es una transformación, es un crecimiento mutuo de todos los días.

¿Cómo usas tu talento para el bien del mundo?

Bueno, pues precisamente por eso empezamos con la actuación, con el teatro. La actuación era mi herramienta de trabajo. Yo llevaba desde los 15 años siendo actriz, y era mi herramienta de trabajo. Así que empezamos con la actuación, con el teatro, y montamos una obra de teatro. Fue lo primero que hicimos en las cárceles de mujeres. La presentamos adentro de la cárcel, a tod el resto de internas, y ese día yo estaba en el público. Pude ver a estas 12 mujeres privadas de la libertad, que eran las que estaban actuando, eran 12 mujeres totalmente transformadas, como con un brillo en sus ojos, con una nueva esperanza de vida. En ese momento, pensé que era el teatro lo que les estaba transformando. Hoy, después de siete años, se y estoy convencida, porque ya lo he comprobado, que lo que realmente transforma a un ser humano es una oportunidad. Son las segundas oportunidades. Son personas que están ahí en la cárcel y piensan que ya se acabó la vida. Pero cuando ven que sí habrá una nueva oportunidad, un nuevo camino, una nueva esperanza, una nueva motivación, ahí es cuando uno, como ser humano, se empodera y vuelve a tener las fuerzas para empezar una vez más.

Entonces, a partir de eso, nosotros en la Fundación Acción Interna trabajamos para generar segundas oportunidades. Pero en su mayoría, estas segundas oportunidades son para personas que no han tenido ni siquiera su primera oportunidad.

¿Cómo recomiendas descubrir el talento?

Por lo que ya he vivido, podría sugerir que, uno, no hay afán, las cosas llegan cuando tienen que llegar. Yo lo encontre tarde, pero, ha sido la mejor forma para mi vida. Entonces, como que no hay afán si ya tienen su pasión identificada y todo desde chiquito, pues maravilloso, dedíquense a eso, exploren y cultívenlo, y sean los mejores en eso. Pero si no, no hay afán, en algún momento llegará.

Los segundo, es que creo yo que servir es un talento que todos tenemos. Y realmente es muy gratificante poder devolverle a la vida lo generosa que ha sido con uno. Es poder ayudar a otros, es poder cambiar la vida de una persona. Creo yo, que eso le da sentido a la vida de uno. Yo creo que por eso es como la motivación de los papás, de las mamás. No, yo me muero por ese man, obvio, porque empiezas a pensar más en otra persona que en uno mismo. Y yo creo que algo así es parecido a la parte de servir. Cuando uno siente que ha cambiado una vida, es muy motivador y realmente uno si siente que ya valió la pena haber llegado a este mundo a algo.

Quiero invitar a todos los jóvenes para que vayan a la página www.loszuper.org. Para que conozcan todas las historias que están en esta plataforma, para que conozcan todas las oportunidades, todas las vivencias. Como hemos encontrado algunos su pasión, un poco antes, otros un poco más tarde, pero como impactar a la sociedad, ver cómo podemos hacer todos algo mejor por este mundo, cómo podemos apoyar con un granito de arena, cómo podemos cambiar, cómo podemos inspirar, sobre todo.

Así que ustedes, jóvenes, que son los que más inspiran, los invito a que visiten www.loszuper.org.

Santiago Botero Responde Cómo Se Convirtió en un Ciclista Profesional y Campeón Mundial

Santiago Botero Responde Cómo Se Convirtió en un Ciclista Profesional y Campeón Mundial

¡Hola! Soy Santiago Botero, ciclista profesional por más de 20 años, campeón mundial y ganador de etapas en el Tour de Francia y la Vuelta a España. Romandia.

¿Cómo descubriste tu talento?

Digamos que al principio me vi obviamente, el deporte fue algo afin conmigo. El deporte, obviamente, me generaba espacios de disfrute con mis amigos en casa porque mi papá siempre acostumbraba ver fútbol y ciclismo. Desde pequeño, en mi casa, el deporte siempre estuvo ahi, una bicicleta, un balón; como muchos de los jóvenes.

Ya, durante el colegio, si nos vamos a eso, no fue el mejor espacio para descubrir o darme cuenta que tenia habilidades para el deporte, ya que en esa época, en esa generación, al joven o al estudiante se le enfocaba en si era bueno para el fútbol o si no era bueno para el futbol, ya no servía para el deporte, pues, en el caso de los hombres.

En ese trayecto, pues ya me encuentro bien en la bicicleta. Una invitación con un amigo, encuentro una bicicleta un hobbie, una afición. Me monto en la bicicleta, arranco a subir a un alto, a equis alto pues, ha de Medellín, el alto de las Palmas. Y una vez llego a la cima, como a la semana, finalmente, despues de varios intentos después, ya me doy cuenta de que montar en bicicleta me genera una enorme satisfacción, osea, que me gusta el montar en una bicicleta, recorrer x distancia, conocer diferentes lugares, sitios. Como que me daba esa libertad que uno encuentra cuando es joven y no tiene acceso a un vehículo, la bicicleta.

¿Cómo te ha ayudado la perseveracia a alcanzar tus sueños?

Desde el principio, fue muy persistente. Todos los días salía. Todos los días salía. Un día me sentía mejor, otro día no. Un paso para delante, dos para atrás, pero siempre me mantuve la constancia y esa perseverancia, digámoslo así, en la práctica de la bicicleta a modo recreativo. Ya me intercalándolo con el colegio, los resultados en el colegio empiezan a mejorar, mejorar en cuanto a lo académico.

Ya dentro de la universidad, lo sigo combinando. Entró a competir en áreas recreativas. Todavía consigo triunfos, repito, áreas recreativas amateur. Y esos triunfos en competencias regionales me dan pie a enfocarme por la parte competitiva, o sea, algo en lo cual nunca había pensado desde el comienzo, sino que para mí era simplemente una actividad, un disfrute, digamos, si, como un juego.

Ya en un momento, en ese momento que empiezo a ganar, Ya ahí, bueno, quiero competir, quiero prepararme para competir, siempre mezclándolo con la universidad, administración de empresas y así. Entonces, ya empiezo a competir que si en ciclomontañismo, en el velodromo, empiezo a obtener triunfos y poco a poco fui creciendo en cuanto a mi nivel. Hasta que llego un momento, un momento de mi vida que se me presento la opción que era el ciclismo como carrera profesional o seguir mi carrera como administrador. Esto fue ya a los 22 años talvez, osea, ya tarde realmente pensando en que los deportistas inician a una edad temprana. Entonces, bueno más o menos ese fue el comienzo, no muy planificado, no muy organizado, no muy estructurado desde las categorías menores hasta la alta. Sino que fue algo como que: aparecio la bicicleta, me monté en ella, me gustó, empecé a entrenar todos los días, note mejoría. Una vez que notó mejoría me da por competir, compito, ganó y ya empiezo a estudiar las diferentes modalidades pero encuentro digamos a esa seguridad sobre una bicicleta algo que había perdido en el colegio podemos decir, entonces, bueno más o menos ese fue el comienzo mi vida en el ciclismo.

¿Cómo recomiendas descubrir el talento?

Ser atentos, yo creo que hay que ser muy analítico y críticos, en cuanto a lo que son ellos en ese momento, lo que han vivido, qué experiencia los ha llenado más, cuáles no, y así poder hacer un diagnóstico para enfocar su vida, su vida profesional y, ojalá, por el camino correcto inicialmente. Y si no es ese, hay muchas alternativas, y eso no significa que usted es un fracasado, no puede hacer un giro y continuar. Repito: un ver eso como un aprendizaje.

Entonces, yo creo que eso es lo más importante. Y si yo me pongo a ver desde el principio, lo que fueron esos años una vez que entré a estudiar administración. Si, la administración, muy aplicable a cualquier campo de la vida, me gustaba tal, pero para mí era primero y por encima de todo la montaba en bicicleta. Entonces, decía: «Bueno, pero será, será que soy muy vago». Pues, porque claro, en muchas universidades acá, todavía se señala, al menos en Colombia, se señala al deportista como el menos aplicado para el tema académico, y no necesariamente es así. Simplemente, le gusta mucho el deporte o tal vez va a ser un gran ciclista y no un gran administrador.

Entonces, yo, en esa carrera universitaria, eso fue lo que me pasó. Yo, cuando estaba estudiando, para mí era más importante. Si estudiaba, cumplía con los requisitos, pasaba las materias. Hay algunas que me gustaban más que otras, pero por encima de todo, estaba la práctica de la bicicleta para competir o no. Entonces, en ese orden de ideas, cuando se me fueron presentando las oportunidades, fui tomando las que me llegan a un mayor crecimiento en mi carrera como ciclista profesional, que apenas viene a tomar la decisión final una vez que conclui mi carrera como administrador, osea tarde, pero con plena seguridad y convicción de que era lo que me gustaba hacer.

Los invito a que entren a loszuper.org para que se entrenen en estas habilidades.

Santiago Botero ha sido uno de los ciclistas más importantes en la historia del país, siempre con disciplina, siempre recibiendo la retroalimentación para mejorar. Nos demuestra que es muy importante tener esa capacidad de resiliencia, tener mentalidad de crecimiento y una meta fija para lograr nuestro proyecto de vida. Los invito a que se suscriban a este canal y estén pendientes de todo lo que pasa con los Zúper.

 

Alejandro Villalobos, Director de Radio, Piensa Que Todo Debe Hacerse Con Compromiso

Alejandro Villalobos, Director de Radio, Piensa Que Todo Debe Hacerse Con Compromiso

¡Hola! Soy Alejandro Villalobos, director de radio y productor de eventos musicales.

¿Cómo descubriste tu talento?

Yo, la verdad, nunca planeé el orden ni los tiempos. Lo que hice fue seguir lo que me gustaba. Desde que tenía 14 años, me gustaba el tema de la música, me gustaban los equipos de sonido, grabar cassettes y toda una cantidad de cosas. Fue ese instinto el que me dejó, me hizo seguir la línea de esto, de la radio, llegar a la radio. Yo estudié mercado y publicidad, pero terminé haciendo radio por pasión.

En esto, pues, no hay fórmulas, como tampoco hay tiempos. Pero de ello uno debe evaluarse a los 17, 18, 19 años y, una vez graduado del colegio, debe en los próximos cinco años ubicarse en una carrera, para que después de eso ya tenga claro cómo esa cuidad. Porque hay gente que, a los 20 años, no sabe qué hacer en su vida, y la gente maravillosa, como decía una canción, que a los 40 tampoco lo saben. Entonces, esto de los tiempos, si es que yo, ya que tengo 22, soy un inútil porque no tengo nada listo y así, en alguna conferencia, a alguien lo decía. Grandes personas, en el nombre de VIRGIN, y hay una cantidad de ejemplos. Gente que, ya a los 40-45, es que ha logrado hacer sus proyectos. Entonces, nunca se dejen presionar por tiempos. Eso me parece que es importantísimo. Eso es claro, si ustedes, yo lo digo, yo a los 15 años sabía que quería y fue lo que hice. Pero el tiempo mío no es el tiempo de mi hijo o de algun un joven. Puede que alguien, a los 25 años, no tenga claro que es lo que va a hacer. Pues no se enloquezca porque pronto salen los 30 o a los 35. Lo que sé que sí tenemos que tener es una pasión. No importa lo que usted vaya a hacer, pero que le apasione. Eso suena un poquito a frase «Cliché», pero, es una realidad. Si yo no siento, si yo quiero ser un futbolista, pero no me apasiona el fútbol, pues yo quiero ser futbolista y «quiero ser como Messi o como Cristiano y para ganar plata», pero, por ahi no es. Tiene que ser una persona que se despierte y está queriendo ponerse los guayos, que duermen con guayos, que le apasiona. Entonces, eso me parece que es demasiado importante, la pasión. Y otra cosa, repito, no sé atormenten por los tiempos.

¿Por qué es importante la disciplina?

La disciplina es un tema de hábitos. Ese es casi como lo que le digo esto a mi hijo. Como por las mañanas, cuando uno se organiza para ir al colegio, para ir a lo donde uno sale a trabajar. ¿ Uno que hace? se levanta, listo, desperte, va al baño, se ducha. Sale de la ducha, se seca, sale, se pone los calzoncillos, la camisa, las medias, el pantalón. Se dice, ese es un hábito, una disciplina que se volvió hábito, un hábito se volvió disciplina. El como usted, porque si usted un día se levanta, se pone los zapatos, se mete a bañar, sale, se pone las medias, está en problemas porque no hay un orden, no hay una disciplina que se volverá hábitos. Ya luego las cosas se vuelven fáciles. Me levanto, me meto a la lucha, me baño, me seco y me pongo los calzoncillos, las medias, y al final el pantalón, no, no, pero es una cosa muy boba. Pero yo creo que puede ser un poco de esa base de disciplina y de hábitos. Entonces, si usted le apasiona lo que sea, la cocina, me encanta, bueno, busque hábitos, busque disciplina para todos los días, voy a leerme unas líneas, de todos los días, de todos los días, mover un tutorial de YouTube de nuevas recetas y cójalo y hágalo. Hace rato no veo chefs en YouTube, coja disciplinas y vuelvala habitos, ¿cierto?, eso yo creo que lo puede ayudar mucho.

¿Qué se necesita para un proyecto de vida?

Yo creo que el compromiso es muy importante. No importa que trabaje desde su casa, no importa que trabaje viajando por el mundo, no importa que trabaje cuando se le dé la gana. Pero cuando haga las cosas, lleve las preparadas, tenga claridad de lo que tiene que prepararse. No, no, no, no improvise, o sea, haga las cosas bien hechas, ¿cierto? Yo sé que hoy en día el tema de cumplir horarios eso pertenece a otra generación y el lugar de trabajo, eso también es tal vez de otro estilo de épocas, pero repito, no importa dónde esté haciendo lo que haga, no importa en el momento que lo haga, pero cuando lo haga, hágalo con compromiso, bien hecho y con calidad. Lo que sea, lo que sea que usted se vaya a dedicar, a limpiar espejos en baños, bueno, sea el mejor limpiando espejos. No sea el segundo ni el tercero, sea el mejor, va a ser el que va a montar un restaurante, uno pequeño en el barrio, bueno, que sea el mejor restaurante, el más berraco, ¿cierto? Y de nuevo, nunca se sienta mal, ¿usted es el que monto el restaurante, ese es su trabajo? Sí, y tengo el restaurante número uno del barrio, pero fulanito es un doctor y, ¡vea!, ganó premios en Europa y todo va bien por él. De pronto, por encima de las cinco, por encima de mí, no hay ninguno. Muy importante,

Tips para construir un proyecto de vida

Muy importante siempre para el trabajo, para los proyectos, prepárense, trabajen fuerte y sean constantes. Si no lo hacen así, viene otro y luego lo hace mejor.

La Actriz Maria Cristina Pimiento Aparece para Contar Sobre Su Poder Secreto

La Actriz María Cristina Pimiento Aparece para Contar Sobre Su Poder Secreto

¡Hola! Soy María Cristina Pimiento y soy actriz.

Desde muy niña, en mi casa ha sido importante hablar de nuestros sentimientos, de cómo nos sentimos, de las emociones. Yo creo que desde muy niña empecé a entrenar el tema de reconocer dónde estaba yo emocionalmente, y también físicamente un poco. Después ya vino la actuación, y con la actuación, en realidad, esa carrera ha sido una terapia eterna que a mí me ha ofrecido el conocerme, el reconocerme, el saber lo que me gusta, lo que no me gusta, lo que tengo yo para ofrecer en mi entorno. Cada personaje me ha mostrado un poco como un espejo de lo que yo tengo, y desde ese espejo he podido también yo trabajar y construir esos personajes.

¿Cómo has desarrollado la empatía?

La actuación me ayuda a ser una persona empática y compasiva, y muchas veces, incluso cuando tiendo a juzgar, de pronto ligeramente, a alguien, enseguida se me viene algún recuerdo específico de algo que yo también he experimentado en mi parte personal o también en la parte profesional, que yo haya desarrollado algún personaje en el que me pueda poner en los zapatos de la persona que estoy juzgando. Eso es algo que de verdad me ha ayudado muchísimo la actuación a desarrollar: la empatía, no juzgar. No juzgar no puede ocultar a los personajes que uno desarrolla en la televisión, el teatro, en el cine, y mucho menos puede juzgar uno entonces en la vida real a una persona a la que uno conoce, y lo mínimo que no puede hacer es ponerse unos zapatos de esa otra persona.

¿Por qué es importante el trabajo en equipo?

El trabajo en equipo en mi vida ha sido muy importante, y lo pongo en la parte profesional. Pongo un ejemplo: la parte profesional como actriz. Muchas veces he agradecido enormemente tener compañeros en escena que están alerta y con la escucha abierta para ayudarme en los momentos en donde en la escena más importante del día se me olvidado la letra, y ese compañero ha estado ahí para sacarle adelante, porque sabe que sigue después y sabe que en ese momento yo necesito ayuda. Ha pasado varias veces y lo agradezco muchísimo. Y al mismo tiempo, yo he podido también salvar días de grabación o la escena más importante del día por estar alerta y activa, y sabiendo que de mí depende también el buen funcionamiento de un día de grabación y del éxito de una escena.

Y, ¿En la parte familiar?

En la parte familiar, hoy el trabajo en equipo pues es aún más importante que incluso en la profesional. Vuelvo y digo, desde siempre hemos tenido claro cuáles son nuestros roles de la familia, dentro de la familia, y contar, por ejemplo, con mis hermanos que son unos miembros de equipo importantísimos, pues no sé cómo lo habría hecho hasta hoy llegar hasta dónde ha llegado y grabarme la maestría si no hubiera tenido esas palabras, incluso de aliento, cuando más lo necesitaba. Son pequeños detalles de personas que pertenecen a tu equipo, pero absolutamente necesarias.

Estoy aquí en los súper para invitarlos a que se unan a este equipo, a este equipo de superhéroes. Queremos cambiar el mundo, únanse para aprender de las habilidades que se necesitan o para contarnos también su historia seguramente ustedes ya están cambiando el mundo.

Maria Cristina Pimientos siempre tiene una sonrisa para explicar las cosas. Ella es una actriz que ha trabajado en equipo pero no solamente con productores y con otros actores sino con su familia para hacer que las cosas pasen los invitamos a que se suscriban a este canal y estén pendiente de todo lo que sucede con Zuper.

UAM TOKS | Charla con Gabriel Vallejo | Todos Podemos Cambiar El Mundo

UAM TOKS | Charla con Gabriel Vallejo | Todos Podemos Cambiar El Mundo

Cuando la Universidad y Daniel Vélez me hicieron esta generosa invitación para compartir con ustedes y hablar de la cuarta revolución industrial, que tiene que ver con cómo vamos a utilizar el tiempo, la experiencia y el talento de las personas, sentí que había algo importante que debía decirles. Hay una persona en Manizales y en Caldas que, en mi opinión, debería sentirse muy orgullosa. Siempre que uno va a nivel internacional y pregunta de dónde es, mi abuela, que es de Pereira, dice: «No, usted nació en el Viejo Caldas, nació aquí». Esa persona, en mi opinión, es el mejor embajador que la región puede tener, y se llama Gabriel Vallejo.

Gabriel lleva muchos años dedicado a entender el servicio al cliente. Ha sido vicepresidente de tiempo, gerente del Canal Capital, trabajó en el Nobel y creo que si queremos empezar a cambiar el mundo, cada uno de nosotros debe pensar en cómo podemos cambiar nuestro propio entorno. Con Gabriel, podemos aprender cómo hacerlo, porque en la cuarta revolución industrial, el eje cafetero no tiene por qué ser una víctima, sino que podemos liderarla con nuestras habilidades.

Lo que necesitamos es ponernos de acuerdo sobre cómo alinear no solo las empresas y universidades, sino también los astros, para que las cosas sucedan. Gabriel aceptó mi invitación para hablar con ustedes sobre cómo todos podemos cambiar el mundo. Así que, si me acompañan, den un aplauso a Gabriel. [Aplausos]

Buenos días, don Gabriel. Es un saludo muy especial. Nos van a proporcionar unas sillas para los editores. Es una universidad maravillosa. Caminando con Juan, vimos que tienen una sensibilidad especial por la naturaleza, las plantas y las flores, cosas que para muchos pueden pasar desapercibidas, pero que reflejan el sentimiento de quienes tienen la convicción de que en lo simple y sencillo de la vida es más fácil encontrar la felicidad y la satisfacción donde está el encanto de lo que nosotros hacemos si yo me siento profundamente honrado de que mi gran amigo me haya invitado a este conversatorio que másque un conversatorio es un diálogo informal y más allá de lo que juan representa en el mundo como copresidente del foro económico mundial.

Como el tema de los puestos que tienen en ser profesor y demás, pues me parece que Juande representa el sueño de lo que muchos quisimos cerrar base en la vida. Y lo primero que yo quiero preguntarle porque acá estamos ante un auditorio muy mezclado de personas muy jóvenes como nosotros, unas personas obviamente mayores, pero aquí hay muchos estudiantes. Entonces, ¿and David, cuando uno piensa en el libro suyo que es mágico además se lo recomiendo a todos, pues la mayoría de estudiantes hoy cuando ustedes preguntan que quiere hacer quieren ser emprendedores porque en general la gente no quiere tener hoy un puesto de trabajo fijo en términos de un jefe una persona que marque tarjeta y demás? Y cuando uno lee el título del libro y uno dice «Todos podemos, todos podemos cambiar el mundo, cambiar el mundo gracias, todos podemos cambiar el mundo», pues el título suena maravilloso, pero también suena un poco soñador porque no le cuenta al auditorio y nos cuenta cuáles serían los tres elementos que en su experiencia han sido fundamentales y definitivos en términos de poder iniciar un emprendimiento. Los tres, ¿usted decir mis tres puntos concretos que yo le diría a una persona que tengo el frente sobre el emprendimiento? ¿Cuáles?

Gabriel, gracias. Ustedes ven perfecto si ustedes también la mejor. Y yo creo que uno de los retos que tenemos nosotros, yo creo que no solamente a la hora de hacer un emprendimiento social o de negocio tecnológico, y yo creo que nos han obsesionado, nos han insistido mucho que hay que tener buenas ideas. Y yo creo que el principal problema que tiene o que tenemos nosotros es que nos enamoramos muy rápido de las ideas, y entonces no sé si les pasa como que uno no tienen como lo queramos un chispazo de creatividad y entonces uno está en el baño y dice «esto lo que tengo que hacer» y al otro día arranca y se lo empieza a vender a todo el mundo y tengo una idea y tengo una idea y tengo una idea. Yo creo que el problema que tiene eso es que hay ideas que no resuelven ningún problema, y creo que parte de la conversación de «Todos podemos cambiar el mundo» y en el libro es porque todos nos deberíamos obsesionar en resolver problemas y ser muy buenos resolviendo problemas porque a uno lo contratan o le pagan en la vida profesional, sea emprendedor o esté trabajando en una organización, es porque uno sabe resolver problemas. A uno no lo contratan porque oiga qué buena idea tiene, con lo contratado, usted es bueno para que el problema esté resuelto. Y yo creo que si uno, la primera cosa que tiene, yo diría, es uno se tiene que obsesionar con problemas. En qué sentido, en que por ejemplo, si alguien quiere mejorar la movilidad, no debería enamorarse la aplicación que se le ocurrió, sino precisamente de el problema de la movilidad, cómo lo va a resolver. Esa sería la primera.

Lo segundo es que Gabriel tiene un libro sobre el servicio compasión. Ahí hay una cosa que a mí, con los años, he cambiado mi opinión frente al tema. Pero para que ustedes sepan un poco, mi mamá es una licenciada en artes plásticas y no más de las que le dice a uno «vamos a meditar». Mi papá es un ingeniero electrónico, que les vamos a hacer un DAFO (debilidades, oportunidades, fortalezas) para tomar una decisión, y en la mitad de esa locura. Y entonces, digamos que los dos me acuerdo que eran muy insistentes con mi hermana y conmigo, era que no fuéramos apasionados.

Y yo creo que eso, con la vida, pues nosotros lo hemos ido cambiando con opinión, pero es bien particular, es porque a todos nosotros nos han dicho que la pasión es fundamental, ser apasionado, ser apasionado, ser apasionados. Y un día, mi papá, en ese momento era en Cartagena, me dijo: «mejor vamos a meternos en Carta, pero ustedes lo pueden hacer en su celular ahorita. Si ustedes buscan la definición de pasión en Google o en la RAE, la primera definición de pasión es el arte de padecer. Lo contrario a la acción».

Y yo lo miraba como era raro, porque el colegio siempre me insistía: encuentra tu pasión, busca tu pasión, y creo que vivimos en una sociedad alrededor de la pasión. Yo creo que la pasión es como la cafeína, eso usted entra con ella, pero eso se va a acabar en algún momento. Hay días en los que usted no va a tener pasión, hay días en los que usted va a decir: «con una nube gris en arriba que va a decir que ese quieto».

Si usted se concentra en identificar el para qué lo está haciendo, es decir, si usted encuentra las razones correctas de por qué lo está haciendo, que es hoy en día pues lo llamara el propósito, usted se va a levantar en los días grises y lluviosos, a pesar de que no tenga pasión. Y creo que eso ha sido fundamental a la hora de hacer cosas. Y es porque a la hora de crear o emprender, todo cuando uno arranca es con el propósito primero y no, si no está apasionado, creo que tiene más gasolina para llegar al final, la mayoría de mis amigos que se han casado y que muchos se han separado, cuando le pregunto por qué, dice: «no se nos acabó la pasión». Y cuando uno empieza a mirar, es nosotros tenemos un reto con la definición de pasiones, porque creo que entendemos una cosa a veces distinta cuando podemos estar hablando de entusiasmo. Esas serían dos y la tercera, yo creo que tiene que ver con la sostenibilidad.

En varios puntos, el primero es que el principal oxígeno que uno tiene en la vida llega a través de su nariz y ¿qué quiere decir con eso? Es que uno primero se tiene que poner su propia máscara. Usted me ha acompañado en liquidaciones de proyectos y a veces ponemos a los demás antes que a nosotros mismos en los emprendimientos. Contratamos gente y les pagamos primero a todos antes que a nosotros mismos, y creo que eso es un fracaso. Ahora mismo, en la mitad de un proceso que usted conoce, estamos liquidando una organización y me di cuenta de que el principal fracaso fue no haber puesto mis honorarios y pagos al principio dentro del costeo y el flujo de caja. Esto tiene implicaciones importantes, ya que si uno no es sostenible como persona, no sabe cómo se va a financiar desde el punto de vista financiero, lo que llevará al fracaso. Pero también tiene que ver con la sostenibilidad de los talentos, que muy pocos hablan de lo que significa. La sostenibilidad de los talentos es cuánto tiempo le dedicamos a entrenarnos a nosotros mismos y a la gente con la que trabajamos.

En mi opinión, el reto frente a la cuarta revolución industrial es el aprendizaje constante. Netflix funciona a través de suscripciones que nos paga mensualmente. Creo que parte de lo que va a pasar en la educación en los próximos años es que se volverá un modelo de suscripción o anual o mensual, donde uno pague por ir a la universidad, salir, volver, salir y volver, porque necesitamos aprendizaje constante. Xavi habló de la sostenibilidad del talento, y la otra parte de esa sostenibilidad tiene que ver con el entorno. Eso es una obsesión desde lo que nosotros hacemos. Cuando no hacemos las cosas por las razones correctas, no le hacemos daño a los demás. Eso significa que tenemos que evaluar muy bien cuál es el impacto que cada acción que uno tenga tiene en el medio ambiente o en el agua.

Creo que estas son las tres cosas importantes para emprender. Hay un tema que a mí me ha apasionado toda la vida, especialmente en los últimos 15 años, que es mirar a las personas que uno ve como ejemplos en el resultado. Cuando uno mira la historia de Bill Gates, Steve Jobs, Elon Musk, y otros grandes personajes que han logrado un éxito organizacional que la gente traduce normalmente en plata, yo lo veo un poco distinto. Tuve la oportunidad hace un par de semanas de escuchar a Obama en una plataforma de marketing, y cuando le preguntaron qué les decía a sus hijas en términos de educación, una cosa que me llamó mucho la atención y es  Bill Gates, quien hoy es uno de los cinco hombres más ricos del mundo, comenzó a pensar en el tema de las computadoras, nunca imaginó que su sueño sería convertirse en el hombre más rico del mundo. Cuando Jeff Bezos creó Amazon, su obsesión no era hacer dinero, sino brindar soluciones complementarias a la vida de las personas. El emprendimiento es un tema complejo, ya que emprender con hambre puede ser bastante difícil. En el proceso de persistencia, muchas personas se retiran porque sienten que no están generando suficientes ingresos. Normalmente, las personas terminan haciendo actividades que no les apasionan. Un artículo de Gallup demuestra que solo el 13% de la población colombiana es feliz en su trabajo, a pesar de que pasamos el 80% del tiempo en el trabajo. ¿Cuál es el mensaje para los emprendedores y para aquellos que quieren crear empresas? Es complejo, y cuando se lee la historia de personas como Bill Gates y Jeff Bezos, uno se da cuenta de que ellos también fracasaron muchas veces antes de alcanzar el éxito. La experiencia como emprendedor puede ser un ejemplo para otros. ¿Cuáles son los superpoderes de un emprendedor o líder? Para mí, más que un superpoder, es la pasión con la que uno hace lo que hace. Es el amor infinito con el que uno hace las cosas lo que hace que servir a los demás sea una prioridad. Cuando uno admira a personas que están haciendo cosas increíbles en Latinoamérica, como Henri y Bradford, el rector del CESA, se da cuenta de que la mayoría de las personas que han tenido éxito en sus emprendimientos tienen claro cuál es su súper poder. Descubrir este talento a veces puede ser complejo, pero la mayoría de las personas lo descubren al hacer las cosas, no meditando. Los negocios, emprendimientos y proyectos se construyen alrededor de este talento, cuándo él pensó en el tema de las computadoras nunca se imaginó que su sueño era ser el más rico del mundo. Cuando oyes versos, creo que Amazon fue su obsesión. No era hacer dinero, sino prestar soluciones complementarias a la vida de la gente. Ese tema en el emprendimiento es tan complejo porque, obviamente, emprender es mágico y maravilloso, pero emprender con hambre es bastante complejo. En el proceso de la persistencia es donde la gente se retira muchas veces porque dice «no me está dando el flujo, no tengo plata». Normalmente, la gente termina en actividades que no son su pasión. Acabamos de sacar un artículo de Gallup donde se demuestra que solo el 13% de la población colombiana es feliz en el trabajo que hace. Pasamos el 80% del tiempo en nuestro trabajo. ¿Cuál sería el mensaje para los emprendedores y para la gente que quiere hacer empresas? Es complejo. Cuando uno lee la historia de estas personas, se cayeron no una, cien veces para llegar. ¿Cuál es su experiencia como emprendedor, como un ejemplo, como un líder? ¿Cuál es su superpoder? El mío, pues yo creo que mi esposa porque me está viendo en este momento que es lo que yo había deseado. No, no. Yo creo que más que un superpoder es la pasión con la que yo hago lo que hago, es el amor infinito con el que yo hago lo que haga. Que hace que servir, servir es el tema. Y cuando no mira como como toda la gente que no admira. ¿Piensen ustedes en la gente que admiran? Cuando uno va los latinoamericanos que están haciendo cosas en este momento con Henri y Bradford, el rector del CESA, estamos haciendo un libro sobre cómo América Latina se está preparando para la cuarta revolución industrial desde la gente. Uno empieza a encontrar una foto y es que la mayoría de las personas hicieron como dos cosas. La primera, tienen claro cuál es su superpoder, y eso es a veces complejo porque si no le preguntan cuál es su superpoder y se lo preguntan así como yo, dice cuál es, la mayoría de ellas no lo descubrieron meditando, sino haciendo. Aún no pueden descubrir cuál es su superpoder haciendo. Dioses, que la mayoría de la gente hizo sus negocios, emprendimientos, sus proyectos alrededor de este súper talento. No se alejó de eso. Entonces usted ve, por ejemplo, una emprendedora como Jimena Bravo que usted conoce, que dice que su talento es conectar gente para hacer marketing. Entonces ya tiene una empresa gigante, MTL, pero conectada a lo suyo. Y ustedes miran, cada uno está juntado con estas dos cosas. Y lo mismo los profesionales más exitosos porque eso también es igual de importante. En la gente que está dentro de una compañía, una organización, en gente que logró encontrar ese superpoder y a partir de ese superpoder montar como cuál es su valor agregado, y yo creo que el reto que tenemos, tanto a nivel educativo como a nivel social, es hacer que la gente comience a cuestionarse cuál es su superpoder para cambiar el mundo. Por ejemplo, todos podemos cambiar el mundo. Muchas de las preguntas que la gente me hace en las redes sociales y que me escriben se enfocan en encontrar ese superpoder que uno tiene para hacer cosas. La felicidad en la vida está en encontrar ese superpoder.

En una conferencia maravillosa, hay una parte que me parece mágica, y es cuando se habla de saber cómo hacer preguntas. Una experiencia que me llamó la atención fue la de un carro de la profesora que ustedes miran. Hay una profesora llamada Ellen Langer que ha llevado a cabo muchos experimentos sociales para fomentar la innovación. Una vez, en su primera clase, presentó a un auditorio de 70 personas la foto de una persona que estaba en silla de ruedas y les preguntó si podía manejar. Para sorpresa de ella, todo el auditorio le respondió que era imposible. Ocho días después, en otra clase, la misma profesora mostró la misma foto y les preguntó a los estudiantes cómo podría manejar esa persona. Si buscan en Google, verán la cantidad de soluciones que se presentaron. Creo que parte de los problemas de innovación social en la vida de las personas tienen que ver con que uno no cambia la pregunta inicial. En lugar de preguntar «¿Se puede hacer?», deberíamos preguntarnos «¿Cómo lo hago?».

Hay una historia interesante sobre el presidente Kennedy. Él dijo que el hombre pisaría la luna. Cuando se reunieron en el Salón Oval de la Casa Blanca, alguien dijo que no sabían si era posible o si costaría mucho dinero. La respuesta de Kennedy fue que no se discutiría si era posible o no, sino cómo hacerlo. Creo que cuando cambiamos nuestra perspectiva y comenzamos a pensar en cómo hacer algo en lugar de si se puede hacer, las cosas empiezan a suceder.

Por ejemplo, una emprendedora social nos buscó y nos dijo que recolectaba libros en buen estado para jóvenes en Colombia. Nosotros teníamos un modelo para asesorar emprendedores, así que nos obsesionamos con la pregunta de cómo hacer que esta emprendedora recoja más libros de manera más rápida, llegamos a una solución muy fácil que implementamos. Era cada vez que alguien pedía una hamburguesa o una pizza a domicilio, se le preguntaba al domiciliario en el call center si la persona tenía un libro en muy buen estado en su casa. Si lo tenían, se les pedía que lo enviaran con el domiciliario y nosotros lo recogíamos. Utilizando esta estrategia, pudimos recolectar 35,000 libros.

Para lograrlo, cambiamos la pregunta y creo que este tema de cambiar la pregunta está relacionado con otro, que es un mensaje de WhatsApp que genera mucho miedo. Hablaré de eso más tarde.

El mensaje dice «necesito que hablemos», y creo que esto se debe a que nuestro sistema social y educativo no nos ha enseñado a tener conversaciones difíciles. Las conversaciones difíciles son súper importantes para lograr cambios. A mí me preguntaron cuál es mi obsesión, y es que literalmente le mando mensajes a la gente para tener conversaciones difíciles. Todo el mundo dice «ya lo llamo», pero casi nunca hay una conversación difícil real. El peor disfraz para los colombianos es el de «tenemos que hablar».

Desde el punto de vista social, el Día de la Madre es el día más violento en Colombia, donde más gente muere. Cuando miras las cifras en la fiscalía, tienen que ver con lesiones no fatales que tienen que ver con conversaciones pendientes entre familiares, hermanos, primos y amigos. Muchas veces hay un tema pendiente en las familias o en las oficinas que nadie quiere hablar. Es importante tener conversaciones difíciles para prepararnos para la cuarta revolución industrial y para preparar el sistema educativo. Tenemos que obsesionarnos en tener conversaciones difíciles, aunque sean incómodas y generen un vacío en el estómago.

En mi opinión, algunos somos como tiburones frente al «tenemos que hablar», queremos morder o atacar a la persona que nos dice eso. Por otro lado, hay mucha gente que es como los conejos y evita tener conversaciones difíciles. Yo he tenido que hacerlo en chats familiares.

 

La primera persona que se salió del grupo abandonó el conflicto porque no le gustaba. Yo creo que parte del reto que tenemos hoy en día en nuestra sociedad es obsesionarnos con tener una forma de trabajo en equipo similar a la de las abejas. Las abejas van al panal, se enfrentan al conflicto, vuelven y, a pesar de ello, siguen trabajando juntas. Necesitamos ser más como las abejas para hacer que las cosas sucedan.

Cuando hablo con muchos emprendedores que han logrado hacer negocios maravillosos, hay dos temas que personalmente me preocupan infinitamente. El primero es el bajo nivel de percepción que tenemos acerca del servicio. Tenemos gente maravillosa para inventar y crear ideas, pero en cuanto a la ejecución y el servicio, tienen enormes retos. El segundo tema es el gerencial, porque hay personas que han dedicado gran parte de su vida a diseñar una idea, pero estamos lejos de convertirla en una realidad que se diferencie y se mueva.

Cuando usted nos explica lo que está sucediendo en la transformación y lo que va a pasar con la pérdida de empleos, tengo la convicción de que por más tecnología que haya, jamás se podrá sustituir completamente la interacción humana. El encanto del servicio de la humanidad está en la interacción con el otro. ¿Qué les podríamos decir a las nuevas generaciones en términos de esos dos temas? La importancia del servicio y la importancia del cliente, el trato a la gente. ¿Qué nos puede decir sobre eso?

Creo que en la cuarta revolución industrial, el tema principal será la guerra del tiempo. Es decir, la lucha por tener el tiempo de los demás, por lograr su atención. En la era de la cuarta revolución industrial, tendremos que elegir entre un tema en línea o un tema físico. Entraremos en una era fascinante, ya que antes de la primera revolución industrial, los artesanos eran fundamentales en el proceso de elaboración de productos. El artesano hacía un producto diseñado para el usuario, pensando en el cliente y lo hacía personalizado. Esto indica que gran parte de lo que nos convertiremos en los profesionales de los próximos 50 años es que tendremos que ser mucho más.




Lo que los artistas quieren decir es que vamos a generar productos y servicios que la gente quiera que yo les haga, porque yo quiero tener toda su atención. Eso nos permitirá ser más esenciales como artistas, y el servicio será fundamental. Algunos dicen que con inteligencia artificial se podría replicar cualquier obra de arte del mundo, pero nadie diría que una obra de Picasso o de Miguel Ángel tiene más valor que una obra producida por inteligencia artificial. La razón principal es que lo hizo un humano, un artista, y gran parte de lo que nos buscarán profesionalmente será porque lo que yo hago tiene un superpoder, pero también un valor agregado que lo hace único y especial.

Lo que está sucediendo en la Facultad de Derecho de la Universidad de Columbia es interesante porque se están dando cuenta de que la inteligencia artificial va a conocer todo sobre los códigos, pero nos están entrenando en psicología para acompañar a los clientes durante el proceso y ayudarles a manejar su mente durante un proceso de litigio. Se está volviendo cada vez más importante en todas las profesiones, y los grandes artistas están dedicándose a generar tribus. Si uno logra tener mil clientes satisfechos con el servicio, no necesitará buscar más allá de ellos.

La transición es rara porque las máquinas pueden producir muchas cosas, pero jamás reemplazarán al humano a la hora de hacer valor agregado como un artista. El servicio al cliente será fundamental. En muchos hoteles, cuando uno sale, no hay mucha impresión. La experiencia siempre es la misma, salvo en el Hotel Estelar. Es importante tener en cuenta que el cliente paga nuestro sueldo, y su experiencia es importante.

Pasando al tema de los jóvenes que aún están en la universidad, escucho a mis sobrinos y a los familiares de mi esposa y hermana preguntar si deberían hacer un posgrado o estudiar en el extranjero. Si uno se graduara hoy, ¿debería irse a estudiar afuera?» Independientemente de lo que quiera estudiar, ya sea (1) o (2), usted debería buscar temas complementarios a su carrera o, si encuentra su propósito en otra cosa, decir: «Yo me quiero dedicar a otra cosa», ya que hay un conflicto importante con los padres. Hay un papá que dice: «¿Cómo va a hacer un posgrado en antropología o cosas similares si tiene 25 años y ya estudió derecho?», ¿quién nos puede contar sobre esto? Usted puede decir algo en el auditorio o no.

Además, es importante no pensar solo en el presente sino en los 100 años que vienen. Su hija probablemente vivirá hasta los 110 años y los niños que están estudiando ahora también vivirán mucho tiempo. Nadie debería tener solo una carrera en su vida. Como mencioné al principio, el 65% de los trabajos que los niños están haciendo hoy en día aún no existen. Por lo tanto, debemos cambiar la pregunta: no hay que obsesionarse en octavo, noveno y décimo grado preguntándose: «¿Qué quiero estudiar?» Debemos enfocarnos en otra pregunta: ¿Qué problema quiero resolver en la vida?

Cuando uno se obsesiona con resolver problemas en la vida, entonces dice: «¿Cómo puedo resolver este problema? ¿Puedo usar mi carrera en derecho para resolverlo? ¿La filosofía me servirá para resolverlo? ¿O tal vez necesito estudiar otra profesión para resolverlo?» Esta es una pregunta que, si nos obsesionamos más, tendremos gente que querrá volver a la universidad porque se dio cuenta de que para resolver ese problema tendrán que volver a estudiar muchas veces.

Además, en la era digital, frente a las noticias falsas o las redes sociales, el futuro de la humanidad dependerá del pensamiento crítico. Esto significa que debemos conocernos a nosotros mismos mucho mejor porque los algoritmos pueden manipular mucha información y hacernos creer que nos gusta algo cuando en realidad no nos gusta. Solo conociéndonos mejor podremos tomar mejores decisiones frente a la información que recibimos.

Entonces, cuando uno está pensando en carreras, oficios o profesiones, debe buscar estudiar cosas que lo hagan muy bueno en lo técnico de su carrera, pero también buscar complementariedad. Todos deberíamos estar estudiando filosofía porque la filosofía nos permite acercarnos a preguntas sobre quiénes somos como seres humanos, qué queremos hacer, qué nos gusta y para qué estamos aquí. La filosofía también nos permite saber cómo conversar, cómo respetar al otro y cómo encontrar nuestro lugar en el mundo.

Por último, uno debe hacer las cosas por las razones correctas. Si quiere hacer una maestría, debe hacerla porque está interesado en el tema y no solo porque le van a pagar mejor en mi opinión, 




No hemos entendido el reto de la economía de hoy. Si uno quiere estudiar, aprenderá mejor cómo resolver un problema y eso lo posicionará mejor en el mercado laboral. Creo que podríamos decir que es una razón correcta, pero quien define eso es uno mismo. En mi caso, que estamos metidos en el mundo de la administración, hice un pregrado en administración. Gran parte del reto que tenía a la hora de lograr hacerlo superar por la educación buena nota era que no sabíamos comunicarlo, no sabíamos engancharnos con las audiencias y así lograr generar lo que queríamos. Hoy en día, por ejemplo, nuestra plataforma, Super Punto Hereje, tiene una «screen time» de 38 minutos, es decir, una persona que invierte 38 minutos en la plataforma. Y eso lo hace porque combinamos entretenimiento, educación y tecnología. Si usted estudió, por ejemplo, mis posgrados, estudió periodismo porque le enseñaron a entender a las audiencias a las que iba a producir contenido de manera entretenida. Creo que lo que uno debe buscar es esa la razón correcta por la que uno quiere hacerlo, y creo que el éxito está en desear hacer entrenamiento constante. Si es una maestría, depende del proyecto profesional que cada caso particular tenga. Muy bien, quiero terminar este diálogo para dar paso a las preguntas de ustedes y de la audiencia, con respuestas muy cortas, como en definiciones.

¿En su opinión, cuál es la definición de emprendimiento?

  • Hacer que las cosas pasen.

¿En su opinión, cuál es la definición de fracaso?

  • Hacer que las cosas no pasen.

¿En su opinión, cuál es la definición de éxito?

  • Hacer que las cosas pasen de la manera que uno quiere.

¿Prefiere vivir en el presente o en el futuro?

  • En el presente.

¿Qué es lo que más admira en la vida?

  • A mi hermana, porque quiero recoger un poquito, le quito el tiempo a una pregunta. Hay una anécdota de Walt que me impresiona mucho cuando él habla acerca de la relación de su mamá con su hija, de la forma de comunicarse, y yo quiero que usted les cuente eso porque me parece que tiene un tema muy profundo para todos nosotros. Yo creo que uno de los problemas que tenemos hoy en día, y que tienen que ver con las empresas y el sistema educativo, es que, como ya les decía, nos falta empatía. Pero creo que nos falta empatía con algo muy básico.

 

  •  ¿Cuántos de ustedes les gusta recibir notas de voz de más de un minuto y medio en el celular? 

Bueno, nadie levantó la mano. Ahora les voy a preguntar cuántos de ustedes reciben notas de voz en WhatsApp. Bueno. Entonces, gran parte del problema que tiene mi hermana y mi mamá es que a mi mamá le encantan las notas de voz y a mi hermana las detesta. Y entonces, entre ellas dos nunca se han puesto de acuerdo en algo, algo que yo ni siquiera insisto en los equipos de trabajo, y aquí están varios de ellos. Críticos, venga, 

  • ¿Cómo es que usted le gusta comunicarse? ¿Cómo es que usted le gusta? 

Nuevamente, soy visual. Yo soy kinestésico. Yo soy auditivo. Y yo me doy cuenta de que entre más claridad uno tenga con su novia, con su novio, con la gente, cómo es que le gusta comunicarse, uno tiene mejores relaciones de trabajo. Porque a veces no le preguntamos y no sabemos. Yo les pregunto a ustedes: ¿saben la persona que más quieren, con la que más comparten, saben ustedes en WhatsApp cómo es que le gusta? Y yo creo que mi experiencia me ha indicado que no sabemos cómo a los otros les gusta que se comuniquen. Un estudio en el Hospital de Boston ha demostrado que los médicos mejor evaluados son aquellos que hablan con los pacientes en el lenguaje 



La forma en cómo ellos aprenden y luego van a un hotel, pero en el hotel jamás se preocupan si uno es visual, kinestésico o auditivo. No le hablan de una sola forma, nunca le dicen «Señor», le explican con dibujitos. Queda parte del reto de nosotros el tener que aprender a entender al otro muchísimo más. El problema de ellas dos y, creo que el problema de muchos de nosotros en WhatsApp, que es por donde nos comunicamos, es que no sabemos cómo le gusta al otro que lo entrevisten. Soy yo quien está entrevistando para terminar los temas. Muy por parte mía, la llevo a contarle a mi hermana sí o sí, porque si no me va a ver y me preguntará por qué.

Bien, mi hermana es un personaje espectacular porque por aquí está, donde está Luisa. Allá está Luisa, de las mejores familias de mi hermana Luisa Escobar. Mi hermana, cuando nosotros vivíamos en Manizales, seguía en ballet en Pereira. Tenía ocho años y me acuerdo que esa mujer nunca se miró a sí misma, no la pudimos llevar a pereira, como sea, cogía un bus, ocurría lo que sea para ir a su clase de ballet. Pero a mí eso me parecía bien particular, decía que era loca. Pero con los años, me di cuenta del poder de la disciplina.

Nosotros tuvimos una crisis económica muy brava en el año 99, y mi hermana, en ese año, se graduaba del colegio y quedó de las mejores de su clase en el país. Y en mi casa no teníamos cómo mandarla a estudiar, no había cómo, y ese año quitaron Andrés Bello. Y ese año nos dieron la beca de Ecopetrol. Me acuerdo cuando mi hermana le dijo a mi papá, Alejo, fresco: «Que yo voy a estudiar donde quiero estudiar y luego a lograr». Y yo verla, esa es una hermana que está emocionada jaja. Mi hermana consiguió los co-deudores para estudiar, se fue a vivir a Bogotá, y un día fui a visitarla años después y mi hermana tocaba cubiertos o tres buses para ir a la universidad. Y hoy, 15 años después de eso, esto es una mujer profesional exitosa, dedicada al tema de educación en los EE. UU. Es una mujer que siempre uno admira y que es una bailarina espectacular, buena persona, que me enseñó el valor de la disciplina.

Yo creo que cada uno de nosotros, hombres, tenemos a una mujer que admiramos mucho. Y yo creo que en este mundo que necesitamos hablar de equidad de género, es una responsabilidad, y hablo de nosotros, como hombres, nos toca promover más mujeres, más mujeres, porque tenemos una responsabilidad, con sin duda una cantidad de barreras que aún existen.



Existen aún muchos desafíos para las mujeres en la actualidad, como la discriminación en el empleo cuando quedan embarazadas o están embarazadas. Además, nuestras ciudades no están diseñadas para facilitar el transporte de bebés en coche o autobús. Creo que como sociedad, es importante que los hombres también se involucren en la lucha por la igualdad de género, y especialmente que los gerentes promuevan y apoyen a las mujeres en el lugar de trabajo.

En cuanto al libro que más me ha impactado en mi vida, puedo mencionar «El hombre en el que se convirtió» de Manyi Became, que es la biografía de Franklin Delano Roosevelt. Esta obra me llamó la atención porque nací con una enfermedad respiratoria y pasé mucho tiempo en la clínica de presentación en mi infancia. Mis padres siempre me animaban a ver por la ventana y pensar en un mundo que me estaba esperando, lo que me ayudó a no sentirme como una víctima. La historia de Roosevelt también me inspira, ya que a pesar de tener una vida privilegiada y una gran inteligencia, contrajo polio y quedó paralizado. En lugar de rendirse, se obsesionó con encontrar una forma de mejorar la movilidad de las personas con polio, y durante 15 años construyó piscinas termales en Nueva York y Florida para ayudar a la gente a aprender a nadar y moverse. Roosevelt se convirtió en uno de los presidentes más importantes de la historia de los Estados Unidos Franklin Delano Roosevelt fue reelegido como presidente debido a su capacidad para lograr una «revolución de confianza» en los EE.UU. En el día de su posesión, contó su propia biografía en el libro que él se soñaba posicionándose en el Capitolio, y logró su objetivo a pesar de estar inválido. Su mayor logro fue la creación de una revolución de confianza en el país.

En 1929, durante la Gran Depresión, la gente estaba retirando su dinero de los bancos, lo que generó un problema sistémico. Roosevelt pronunció un discurso presidencial en el que pidió a la gente que confiara en él y en el sistema financiero de los EE.UU., y les aseguró que no retiraran su dinero de los bancos. La historia demuestra que la gente confió en él y no retiró la cantidad de dinero que podría haber retirado.

La obsesión de Roosevelt era crear confianza en los EE.UU. porque la confianza es un capital social que nos permite generar y atraer mayor inversión, creer en nosotros mismos y creer en los demás. La confianza es esencial para enfrentar los desafíos en la vida.

El libro favorito del hablante es «El hombre en el que se convirtió», una biografía de Roosevelt, porque cree que la confianza es fundamental para enfrentar los desafíos en la vida. Mariana Pajón dijo una vez al hablante que la fórmula para el éxito es creer en uno mismo, superar las derrotas y celebrar los triunfos, y el hablante cree que la confianza es la clave para creer en uno mismo.

El hablante cree que necesitamos creer en nosotros mismos en Colombia para liderar la cuarta revolución industrial y comer el mundo entero.